La empresa china BYD dio un nuevo golpe a Tesla, al revelar una plataforma mejorada para vehículos eléctricos con una capacidad de 1,000 voltios que, según dijo, podría cargar los coches tan rápido como si se tratara de un surtidor de gasolina.
Las malas noticias para la empresa de Elon Musk ya le costaron una pérdida de 40% en su valoración bursátil en lo que va del año. Mientras que las acciones de BYD van en ascenso.
El gigante de los vehículos eléctricos, que se ha hecho famoso por romper las normas de costos del sector, tiene previsto construir más de 4,000 unidades de carga ultrarrápida para que esta tecnología esté disponible a lo largo de toda China.
Los coches propulsados por la superplataforma electrónica, con velocidades de carga máximas de 1,000 kilovatios pueden recorrer unos 400 kilómetros con una carga de cinco minutos, según declaró su fundador, Wang Chuanfu, en un acto retransmitido en directo desde la sede de la empresa en Shenzhen.
Actualmente, los superchargers de Tesla permiten cargar hasta 320 kilómetros en 15 minutos. La empresa de Elon Musk tiene alrededor de 60,000 superchargers ubicados en las principales rutas de todo el mundo.
