El asesor de la Casa Blanca, Peter Navarro, dijo el domingo que espera que los aranceles del presidente Donald Trump generen US$ 6 billones en ingresos en la próxima década, lo que podría representar el mayor aumento de impuestos en la historia de Estados Unidos.
Incluso ajustando la inflación, esa cantidad sería el triple del aumento de impuestos implementado en 1942 para pagar el costo de la Segunda Guerra Mundial.

Navarro, el principal asesor de Trump para comercio y manufactura, insiste en que no se trata de un aumento de impuestos sino de una reducción de impuestos, haciéndose eco de la creencia reiterada del Gobierno de Trump de que los aranceles no los pagarán los consumidores estadounidenses sino las empresas de otros países o los propios países.

Trump planea anunciar aranceles adicionales el miércoles, día que ha denominado el “Día de la Liberación”, sobre todo tipo de productos importados como represalia por lo que considera barreras injustas a las exportaciones estadounidenses a otros países. Trump ya ha anunciado aranceles sobre todos los productos procedentes de China, México y Canadá, y esta semana entrará en vigor un arancel del 25% sobre todos los automóviles importados.

La industria automotriz ha sido un foco importante para la administración Trump en su estrategia de aumentar los aranceles.
“Vamos a recaudar unos US$ 100 mil millones solo con los aranceles a los automóviles”, predijo Navarro el domingo.
