SpaceX, bajo el liderazgo de Elon Musk, ha logrado capturar en pleno vuelo la parte inferior del cohete Super Heavy, un componente crucial de su sistema de cohetes Starship. El cohete es recuperado mediante brazos mecánicos en la torre de lanzamiento en Texas.
Este avance técnico no solo revoluciona el acceso al espacio, sino que también plantea nuevas posibilidades para misiones más ambiciosas.
Facilitará lanzamientos más rápidos y económicos, acercando a la humanidad a la exploración interplanetaria.
Abre la puerta a futuras misiones tripuladas de la NASA a la Luna y Marte en los próximos años.
El magnate de la tecnología Elon Musk no solo ha desafiado los límites tecnológicos, sino también las estructuras burocráticas y los modelos de negocio que han dominado la exploración espacial durante décadas. Bajo su mando, SpaceX ha adoptado una filosofía de “aprender a través del fracaso”, lanzando cohetes incluso cuando el éxito no estaba garantizado, todo con el fin de obtener datos valiosos y mejorar rápidamente los diseños.