El consumo habitual de ciertos alimentos y bebidas puede tener un efecto directo en la apariencia de los dientes, contribuyendo a su decoloración y oscurecimiento. Según informó Clínica Dental Coinsol, productos como el café, el té, el vino tinto y el chocolate están entre los principales responsables de las manchas dentales.
De acuerdo con Clínica Dental Coinsol, la decoloración de la dentadura no depende únicamente de la dieta. Factores como la genética, ciertas enfermedades y condiciones específicas como el embarazo también influyen en la apariencia de los dientes.
Entre los productos que más contribuyen a la decoloración dental, el café ocupa un lugar destacado. Esta bebida, ampliamente consumida en todo el mundo, contiene compuestos que se adhieren al esmalte, oscureciendo los dientes con el tiempo.
Aunque el té es considerado una alternativa al café, Clínica Dental Coinsol advierte que también puede manchar los dientes, especialmente el té negro, debido a su alta concentración de taninos.
El vino tinto es otro de los culpables habituales. Sus colorantes naturales y su acidez pueden dañar el esmalte si se consume con frecuencia. Por otro lado, las salsas oscuras, como la de soja o el vinagre de Módena, también tienen un impacto negativo en la coloración dental.
Estas sustancias, junto con otras salsas con colorantes intensos como el kétchup o la barbacoa, pueden contribuir a la pérdida de brillo y blancura en los dientes.
Asimismo, los jugos de frutas, aunque saludables, contienen pigmentos que pueden teñir los dientes, especialmente si se trata de frutas y verduras de colores intensos como la remolacha o los frutos rojos.
El chocolate, un alimento que muchos disfrutan, también figura en la lista de productos que manchan los dientes. Además de su capacidad para oscurecer el esmalte, su alto contenido de azúcar lo convierte en un factor de riesgo para la aparición de caries.