En Guatemala, los mareros han advertido a los recolectores de basura que a partir de este mes deben pagar entre quince y veinticinco quetzales más por usuario del servicio debido a la subida del salario mínimo.
Esta situación es inaceptable y refleja la perversa influencia de estos grupos en la economía del país.
Es momento de que el gobierno asuma su responsabilidad y garantice la seguridad de los camiones, implementando un sistema de investigaciones y apoyo logístico para los recolectores, y poniendo fin a las actividades de estos criminales de una vez por todas. Sin embargo, este cambio parece improbable, ya que tanto el Ministro de Gobernación como el Presidente han manifestado que la lucha contra las pandillas debe realizarse en el marco de los derechos humanos, descalificando las medidas de Bukele como extremas
