El robotaxi de Tesla promete ser un vehículo único en su clase, diseñado para operar sin volante ni pedales, lo que lo diferencia radicalmente de los automóviles convencionales. El objetivo es alcanzar lo que en la industria automotriz se conoce como autonomía de nivel 5, un grado de automatización en el que el vehículo puede circular por la carretera de forma completamente independiente, sin la necesidad de un conductor humano para supervisar su funcionamiento.
Elon Musk ha mencionado en varias ocasiones que el diseño del robotaxi será “futurista”.
Además del diseño exterior, el robotaxi contará con la última versión del sistema Tesla Vision, que utiliza un conjunto de ocho cámaras y un sistema de procesamiento que proporciona visibilidad en 360 grados. El software de inteligencia artificial, basado en algoritmos de aprendizaje profundo, permitirá al vehículo identificar objetos, predecir sus movimientos y tomar decisiones en tiempo real.
En teoría, los propietarios de varios robotaxis podrían enviarlos a realizar viajes simultáneamente, generando ingresos sin tener que estar presentes físicamente en el vehículo.