El martes pasado, la Policía Nacional Civil retomó el control del sector 11 del Centro Preventivo para varones de la zona 18. Aproximadamente mil policías entraron a la fuerza, pues ese sector estaba gobernado por 600 prisioneros del Barrio 18. Lo más sorprendente es que encontraron una gran cantidad de cosas que no deberían estar dentro de una cárcel, como artículos personales prohibidos, refrigeradores, equipos de sonido, televisores, videojuegos, aire acondicionado, celulares y muchas cosas más. Además, encontraron dos armas de fuego. Por si esto fuera poco, en las redes sociales se mencionaba que los reos habían construido una piscina dentro de la prisión.

Cada cierto tiempo vemos cómo se repite este tipo de noticias: la Policía recuperando el control de un centro preventivo o de otro en el que siempre encuentra de todo. A pesar de los supuestos controles estrictos, siempre se encuentran objetos prohibidos, entre los cuales están los celulares y armas que les permiten a los reos delinquir desde la prisión. Esta falta de control es repetitiva. El modelo actual es obsoleto y se ha vuelto incontrolable. No pasará mucho tiempo para que los reos vuelvan a hacer de las suyas dentro de estas prisiones.

Siempre he pensado que hay demasiada incapacidad en el manejo de las cárceles del país. Además de ser insuficientes y existir hacinamiento, hay reos que no deberían estar dentro, y los que están deberían ser controlados por expertos y procedimientos efectivos que impidan a los prisioneros más peligrosos seguir haciendo de las suyas. Si no tenemos la capacidad de administrar adecuadamente las cárceles, ¿por qué no se permite que quienes sí tienen la experiencia y saben hacerlo se encarguen de ello? Hay muchas cárceles administradas y manejadas por empresas con fines de lucro en varios países del mundo. Las ventajas de las cárceles privadas es que son más eficientes y menos costosas que las que administra el mismo gobierno. Como dice el dicho, “zapatero, a tus zapatos”.
¿Dónde hay cárceles administradas por empresas privadas? En Estados Unidos, principalmente empresas como CoreCivic (que antes era CCA), GEO Group y MTC manejan diversas prisiones en varios estados y también a nivel del gobierno federal. Asimismo, en Australia encontramos la Prisión de Northern, que es manejada privadamente. En el Reino Unido están la Prisión de HMP Oakwood y la de HMP Birmingham, que también son operadas de manera privada.

El Gobierno de Guatemala debería considerar que empresas privadas se encarguen de manejar prisiones. Las ventajas para los guatemaltecos son que el costo se reduciría (habría que poner a competir a las empresas entre sí) y el Gobierno no tendría que invertir. Tendría que pagar el servicio por cada prisionero que envíe a la cárcel. Las tarifas variarían si se trata de una cárcel de prisioneros de alto riesgo o no. El Gobierno ha sido, y sigue siendo, incapaz de administrar adecuadamente las cárceles, que más que centros de detención y rehabilitación se han convertido en escuelas de alta criminalidad.

Hay tantas cosas que se pueden hacer mejor privadamente, con fines de lucro. Quien busca tener utilidades dando un servicio y compite con otras empresas tratará de ofrecer el mejor servicio al menor precio. Por supuesto, en el contrato se deben especificar las condiciones mínimas que se requieren y, si no se cumplen, se cancela el contrato y se otorga a otra empresa. Sea como sea, ya hay empresas que tienen la experiencia y no se necesita inventar nada. Cuanto antes se implementen estas prisiones privadas, mejor para Guatemala.
