Home OPINION El caso United States v. Wong Kim Ark, opinión de Melanie Müllers

El caso United States v. Wong Kim Ark, opinión de Melanie Müllers

El caso United States v. Wong Kim Ark es uno de los más significativos en la historia del derecho constitucional estadounidense. Decidido por la Corte Suprema, este caso estableció un precedente crucial en la interpretación de la 14.ª Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, al confirmar el principio de jus soli (derecho de suelo) como base para la ciudadanía. Más allá de su impacto legal, la decisión enfrentó tensiones raciales, políticas y sociales que marcaron a Estados Unidos.

A finales del siglo XIX, Estados Unidos experimentaba cambios dramáticos. El país había abolido la esclavitud, pero la discriminación racial seguía profundamente arraigada. La migración, particularmente de China, generaba tensiones. La Ley de Exclusión China de 1882 restringió severamente la entrada de migrantes chinos. Los migrantes chinos que ya residían en Estados Unidos enfrentaban discriminación y desafíos legales para afirmar sus derechos.

Wong Kim Ark nació en San Francisco en 1873, hijo de migrantes chinos, lo que le otorgaba la ciudadanía bajo la 14.ª Enmienda. Sin embargo, cuando Wong regresó a Estados Unidos tras un viaje a China en 1895, le negaron la entrada, argumentando que no era ciudadano.

El caso planteó una pregunta clave: ¿Era Wong Kim Ark ciudadano estadounidense por nacimiento, a pesar de que sus padres eran extranjeros sujetos a la Ley de Exclusión China? La defensa de Wong sostuvo que su ciudadanía estaba garantizada por la 14.ª Enmienda, que establece que “Todas las personas nacidas o naturalizadas en los Estados Unidos, y sujetas a su jurisdicción, son ciudadanos”. El gobierno argumentó que esta cláusula no aplicaba a los hijos de extranjeros, especialmente de aquellos categorizados como “Ineligibles para la ciudadanía” según las leyes de exclusión.

Wong Kim Ark sigue subrayando la importancia de los derechos constitucionales en un país definido por su diversidad. La Corte Suprema demostró que incluso en tiempos de exclusión, la Constitución sigue siendo una fuente de justicia para todos, independientemente de su origen o ascendencia.

El caso llegó a la Corte Suprema, donde se enfrentaron dos interpretaciones opuestas del concepto de ciudadanía. El gobierno favorecía el jus sanguinis, argumentando que la ciudadanía debía transmitirse por linaje, mientras que los abogados de Wong insistieron en la validez del jus soli, el principio central en Estados Unidos.

En una decisión de 6-2, la Corte Suprema falló a favor de Wong Kim Ark, estableciendo que cualquier persona nacida en Estados Unidos, con pocas excepciones (como hijos de diplomáticos extranjeros), es ciudadana estadounidense. El juez Horace Gray escribió la opinión mayoritaria, basándose en la tradición inglesa de jus soli, adoptada por Estados Unidos tras la independencia. La 14.ª Enmienda, asegurando que la ciudadanía por nacimiento no pudiera ser limitada arbitrariamente.

La Corte rechazó el argumento del gobierno de que los hijos de extranjeros no podían ser ciudadanos. En cambio, sostuvo que las leyes de exclusión no afectaban el derecho constitucional de un individuo nacido en territorio estadounidense. Esta decisión reforzó la idea de que la ciudadanía es un derecho fundamental, protegido por la Constitución y no sujeto a cambios políticos.

El caso United States v. Wong Kim Ark estableció un estándar legal claro para la ciudadanía por nacimiento en Estados Unidos, fortaleciendo el principio de igualdad ante la ley. Este precedente ha sido crucial en debates contemporáneos sobre la ciudadanía, especialmente en relación con los hijos de migrantes indocumentados.

La Ley de Exclusión China no fue derogada hasta 1943 y el racismo siguió siendo una barrera. En el contexto moderno, el caso sigue siendo relevante en debates sobre el alcance de la 14.ª Enmienda. Wong Kim Ark sigue subrayando la importancia de los derechos constitucionales en un país definido por su diversidad. La Corte Suprema demostró que incluso en tiempos de exclusión, la Constitución sigue siendo una fuente de justicia para todos, independientemente de su origen o ascendencia… es importante estar bien informados.

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