El secretario de Estado, Marco Rubio, informó este sábado que Estados Unidos revocará las visas de todos los ciudadanos de Sudán del Sur y prohibirá su ingreso en el país, ante la falta de cooperación de las autoridades con los vuelos de deportación de migrantes irregulares.
La medida regirá hasta que las autoridades de Yuba “respeten plenamente este principio” y “cooperen plenamente” en la recepción de sus connacionales.

Con este anuncio de Rubio, Sudán del Sur se convirtió en el primer país en tener su visado suspendido por completo durante el nuevo gobierno de Donald Trump, a raíz de diferencias en lo que respecta a su política migratoria, uno de los temas principales de su agenda.
Según denunciaron desde el Movimiento, se trató de una estrategia más del presidente, Salva Kiir, por dejarlo fuera del Gobierno y hacerse con el poder absoluto e indefinido.
La ONU advirtió que este avance sobre el principal rival de Kiir es, además de irregular e “inconstitucional”, una amenaza a “la perspectiva y la estabilidad” en el territorio, que tras su independencia en 2011, pasó años inmerso en una guerra que dejó unos 400.000 muertos.
