El gobierno federal instruyó al Departamento del Tesoro detener la producción del centavo, buscando un ahorro significativo en los costos asociados a su fabricación.
La U.S. Mint (Casa de la Moneda de Estados Unidos) cesará la producción una vez que se agoten las plantillas necesarias para acuñar las monedas, proyectando este cambio para inicios del próximo año.
El costo de producir cada centavo ha ido en aumento considerablemente durante los últimos años. Mientras que al inicio de la última década costaba 1.3 centavos acuñar cada moneda de un centavo, en el año fiscal 2024 el costo escaló a 3.69 centavos por unidad.
Con la suspensión de su producción, se espera que el ahorro anual alcanzado ronde los 56 millones de dólares, de acuerdo con el informe del Tesoro.
Las transacciones en efectivo comenzarán a redondearse a la cifra más cercana divisible por cinco, lo que podría llevar a un pequeño porcentaje de inflación en las compras diarias. Con la desaparición del centavo, se anticipan ajustes en las políticas de precios de muchos comercios.