La presunta llegada de Xmail refleja los esfuerzos de Musk por diversificar y expandir el rango de operaciones bajo el alero de X, que puede ser una estrategia de crear una superapp que integraría servicios de correo electrónico, junto con funcionalidades propias de una entidad financiera y pagos móviles.
La fascinación de Musk por la letra X no es un fenómeno reciente, remontándose a su etapa en PayPal, lo que demuestra un patrón de persistencia en sus iniciativas y la continua búsqueda de innovación bajo esta marca.