Ecuador cerró el año 2023 con el trágico balance de 7.200 muertes violentas, lo que supone una tasa de 45 homicidios por cada 100.000 habitantes y coloca al país como el más violento de América Latina, según datos del Observatorio Ecuatoriano del Crimen Organizado.
El panorama criminal de Ecuador, dominado por grupos colombianos, así como por cárteles mexicanos, ha convertido el país en un foco creciente para el crimen organizado.