Ante la debacle político legal, en la que se enclaustra nuestra querida Guatemala, se me hace muy necesario expresar lo siguiente:
El Juez o el Juzgador para poder desempeñar su función debe de buscar el fin supremo, que significa esto, que para poder hacer justicia tiene que utilizar las leyes, su fin es la justicia no el respeto ciego a las leyes.
Al ver la resolución de la Corte de Constitucionalidad revocando la resolución del juez séptimo, me causa pavor ver como la Corte de Constitucionalidad, se presta para consentir ámbitos de impunidad, utilizando como justificador la figura del amparo, argumentando que es por el estado de derecho, que se resuelve de esa manera y separa la persecución penal ya existente de las causas que lo motivaron, manifestando nueva mente, que sin perjuicio cuando este ya esta consumado, violentando de una manera flagrante el derecho de igualdad de la voluntad popular, ya que el partido semilla tiene impedimento penal, y con una investigación vigente, aquí no se está propalando la investigación ni ningún ámbito legal.
Por lo tanto es momento de respetar la voluntad popular la misma que ha sido y esta siendo mancillada por el máximo tribunal, el cual juega con sus resoluciones a su sabor y antojo, politizando su ejercicio, pues si hacemos una simbiosis de la analogía del escenario político legal actual, podremos darnos cuenta que la misma corte impide al candidato PINEDA participar sin tener este una persecución penal como semilla, por lo que insto al candidato Pineda Oportunamente plantear un amparo contundente defendiendo y alegando este derecho, es el derecho de igualdad ante la ley, lo mismo al señor meme conde. Es el momento de hacer honor a nuestra estirpe de guerreros.
Por lo que me permitirá mencionar las palabras proclamadas por el papa Juan Pablo II en el Sínodo de Republica Dominicana en 1984 y el cual dictará la misión, AMERICA LATINA DESDE TU FIDELIDAD A CRISTO RESISTE A QUIENES QUIERAN AHOGAR TU VOCACION DE ESPARANZA.
Guatemala S.O.S, columna de opinión de Roberto Cano
