Europa acaba de dar un paso decisivo en su ambiciosa apuesta por convertirse en un jugador destacado en la industria de los semiconductores. Con una inversión adicional de 8.100 millones de euros en investigación y desarrollo de chips, la Comisión Europea demuestra su determinación para impulsar la producción y la innovación en este sector estratégico.
El anuncio de la ‘Chips Act’, realizada por Ursula von der Leyen y Thierry Breton a principios de 2022, marcó el inicio de un plan audaz para colocar a Europa en el mapa mundial de los circuitos integrados. Esta directiva tiene como objetivo movilizar un total de 43.000 millones de euros en inversión pública y privada para el año 2030. Con esta inversión, se pretende capturar el 20% de la producción global de chips en tan solo siete años.
La tarea no será sencilla, ya que Europa se encuentra en una carrera contrarreloj para desarrollar su industria de semiconductores. Sin embargo, la Comisión Europea está tomando medidas significativas para fortalecer el ecosistema necesario para lograr su objetivo. El proyecto IPCEI ME/CT, aprobado recientemente, es una iniciativa que involucra a catorce países europeos, incluyendo a España, y movilizará 8.100 millones de euros en financiamiento público. Además, se espera que el sector privado contribuya con otros 13.700 millones de euros adicionales. En total, 56 compañías, incluyendo empresas emergentes, participarán en proyectos de investigación y desarrollo.
El enfoque principal de este plan es fomentar la investigación, la innovación y el desarrollo en el campo de los semiconductores y las comunicaciones. Sin embargo, el comunicado de la Comisión Europea destaca la importancia de abordar estos desafíos desde una perspectiva energética eficiente y con métodos de fabricación que minimicen la inversión de recursos. Según la Comisión, se espera tener las primeras soluciones listas en 2025, y el proyecto se completará en 2032.
Es interesante comparar estas cifras con las inversiones realizadas por otras potencias en la industria de los chips. Por ejemplo, las dos fábricas que TSMC está construyendo en Arizona, Estados Unidos, tendrán un costo total de 40.000 millones de dólares, mientras que Intel invertirá 17.000 millones de euros en dos fábricas en Madgeburgo, Alemania. Sin embargo, es importante destacar el compromiso de Intel de invertir un total de 80.000 millones de euros en Europa durante esta década, lo cual muestra un sólido respaldo por parte de la empresa privada al continente europeo. Otros actores importantes, como TSMC, también muestran interés en establecer fábricas en Europa, y están en proceso de negociación con gobiernos como el de Alemania.
Incluso el gobierno japonés ha ofrecido a TSMC cubrir el 50% del costo de una nueva planta de semiconductores dentro de sus fronteras. Si bien la Comisión Europea ha aprobado subvenciones que cubren hasta el 40% del costo total de las instalaciones, aún no está claro si igualará la oferta de Japón. Sin embargo, contar con una planta del
Fuente: Xataka / Juan Carlos López
Video producido y editado por: Tech News