Las exportaciones petroleras de PDVSA aumentaron 10,5 % en 2024. En contraste, el envío de petróleo a la isla disminuyó a unos 32000 barriles por día frente a 56000 bpd del año 2023
El año 2024 no fue positivo para Cuba en ningún sentido. La crisis eléctrica sumió a la isla en la oscuridad, la escasez de alimentos, medicinas o de combustible empeoró y lo corrupción por parte de la dictadura abundó. El envío de petróleo venezolano a la isla fue por el mismo camino ya que este cayó a unos 32000 barriles por día. Si se compara con los 56000 bpd registrados en el año 2023 quiere decir que la disminución anual fue superior al 42 %.
La cifra publicada por la agencia Reuters era previsible teniendo en cuenta que el régimen de Nicolás Maduro tuvo acceso parcial al mercado internacional tras licencias concedidas por el gobierno estadounidense de Joe Biden. Por ende, al cubrir esa nueva demanda, los envíos de crudo y combustible a Cuba mermaron. Aquella bonanza con la cual contó en castrismo mientras el dictador Hugo Chávez vivía, se convirtió en cosa del pasado.
Y es que según el reporte, las exportaciones petroleras de PDVSA aumentaron un 10,5 % en 2024. Mientras tanto, la producción total de crudo “aumentó un 17 % a 914.000 bpd en los primeros 11 meses de 2024”, según cifras informadas a la OPEP, “desde unos 780.000 bpd en el mismo período de 2023”. Pero la cifra sigue siendo paupérrima frente a los 3,3 millones de barriles de petróleo diarios (mbd) que la estatal producía antes de la llegada del chavismo al poder.
Aumentan exportaciones a EEUU y Europa
Si bien el castrismo ahogó la capacidad de producción de energía tras décadas de corrupción, con el régimen venezolano este conseguía un salvavidas ideal para mantenerse a flote. Al no recibir la misma cantidad de barriles, ese respiro se diluyó. México y Rusia aparecieron con cargamentos que tampoco logran suplir la demanda.
En cambio, en la urgencia por acceder a divisas, Nicolás Maduro aumentó las exportaciones a otros mercados con el visto bueno de la Administración Biden. Por ejemplo, los envíos a Estados Unidos aumentaron un 64 % para ubicarse en unos 222.000 bpd en 2024, según el reporte de la agencia. Así, la nación norteamericana se convirtió “en su segundo mayor mercado de exportación detrás de China, que adquirió 351.000 bpd, un 18 % menos en comparación con el año anterior”.
Sumado a eso, “aumentaron las exportaciones a Europa, que casi se triplicaron hasta alcanzar unos 75000 bpd el año pasado”. Es el resultado de las concesiones estadounidenses separadas hechas a la española Repsol, la italiana Eni o la francesa Maurel & Prom (M&P) a raíz de que el régimen venezolano incumpliera los Acuerdos de Barbados. Washington no renovó la Licencia General 44 que proporcionaba un alivio al sector petrolero y gasífero de Venezuela, pero luego permitió negocios en casos específicos.
La conclusión es que el castrismo ya no cuenta con el ciego respaldo de su aliado en materia petrolera. De todas formas, la élite cubana sigue llenando sus bolsillos a través del el conglomerado GAESA, el cual acumula millones de dólares en sus cuentas bancarias de acuerdo con una investigación reciente del Miami Herald. Eso representaría casi 13 veces más que los 339 millones de dólares que el régimen dice necesitar para abastecer las farmacias del país anualmente.
Oriana Rivas
Periodista venezolana radicada en Buenos Aires. Investigación para las fuentes de política y economía. Especialista en plataformas digitales y redes sociales.
