En medio de la cumbre del G20, el presidente libertario y el líder comunista se encontraron por primera vez para avanzar en una agenda común vinculada a las inversiones en infraestructura que pretende Beijing y la necesidad de Argentina de mantener el swap y multiplicar las exportaciones al lejano oriente.
El líder comunista ya sabe de las necesidades de Argentina, Milei negocio con Xi Jinping un soporte financiero a través de un swap por 5.000 millones de dólares con total libertad a cambio de algunos requerimientos del líder chino.
La ambiciosa lista de Xi incluye las represas hidroeléctricas en el sur, las centrales nucleares en Buenos Aires, un puerto de aguas profundas en Tierra del Fuego, la participación en las comunicaciones de Argentina, el control de la Hidrovía, y el acceso al cobre y litio del país.
Milei tiene estas opciones a su alcance, pero a su vez estará condicionado por la llegada de Donald Trump al Salón Oval.