El Vigilante Viajero inicia su viaje hacia Chichicastenango para estar presente en una ceremonia de los Chuchajaw o Chuchcajau.
El recorrido de esta ceremonia es realizado por el sacerdote maya, ya que una persona le solicita el apoyo espiritual y la comunicación con el Ajaw, dado que el sacerdote tiene el conocimiento ancestral y mejor comunicación con Ajaw.