El observatorio ya fue puesto con éxito en la órbita terrestre. Se trata del primer instrumento a gran escala de China para estudiar el Sol, y permitirá captar y estudiar imágenes de nuestra estrella más cercana durante un período de intensa actividad solar, la cual alcanzará su punto máximo alrededor de 2025.
El telescopio fue nombrado Kuafu-1, en honor a un gigante de la mitología china que perseguía al Sol. El aparato opera a 720 kilómetros sobre la Tierra, pesa 859 kilogramos, está equipado con tres cargas útiles y está configurado para funcionar durante más de cuatro años.